lunes, 22 de abril de 2013
2º HISTORIA: LAS INVASIONES BÁRBARAS. EL FIN DE LA ANTIGüEDAD Y LOS COMIENZOS DE LA EDAD MEDIA.
Europa y las invasiones bárbaras
La Europa actual se formó como resultado de invasiones de pueblos muy diferentes, que se desarrollaron entre los siglos III y IX y se llamaron, de manera genérica, invasiones bárbaras. Como resultado de esas invasiones, el Imperio Romano fue dividido en dos: el Imperio Romano de Occidente, con su capital en Roma, y el Imperio Romano de Oriente, con su capital en Constantinopla. A partir de esa división, comenzó una historia diferente para cada uno.
Imprimir o copiar los textos para trabajar en clase.
LLevar mapa de Europa Político, tamaño oficio.
jueves, 18 de abril de 2013
PRIMERO FEyc/ SOBRE LA RESPONSABILIDAD
LA RESPONSABILIDAD DEL SER HUMANO
Significados de la palabra responsabilidad.
La "responsabilidad" es la necesidad de responder de un acto concreto y determinado.
La palabra responsabilidad proviene del latín responsum, que es una forma de ser considerado sujeto de una deuda u obligación. (por ejempo, paga los impuestos)
Pero, en nuestra ida diaria, la responsabilidad es la virtud individual de concebir libre y conscientemente los máximos actos posibles universalizables de nuestra conducta.
a palabra responsabilidad contempla un abanico amplio de definiciones. De acuerdo al diccionario de la Real Academia Española (RAE), hace referencia al compromiso u obligación de tipo moral que surge de la posible equivocación cometida por un individuo en un asunto específico. La responsabilidad es, también, la obligación de reparar un error y compensar los males ocasionados cuando la situación lo amerita.Otra definición posible mencionada por la RAE señala que la responsabilidad es la habilidad del ser humano para medir y reconocer las consecuencias de un episodio que se llevó a cabo con plena conciencia y libertad.
Por lo tanto, una persona responsable es aquella que desarrolla una acción en forma consciente y que puede ser imputada por las derivaciones que dicho comportamiento posea. De este modo, la responsabilidad es una virtud presente en todo hombre que goce de su libertad. Más exactamente podemos determinar que una persona que se caracteriza por su responsabilidad es aquella que tiene la virtud no sólo de tomar una serie de decisiones de manera consciente sino también de asumir las consecuencias que tengan las citadas decisiones y de responder de las mismas ante quien corresponda en cada momento.
Para que pueda darse alguna responsabilidad son necesarios dos requisitos:
libertad.- Para que exista responsabilidad, las acciones han de ser realizadas libremente. En este sentido, ni los animales, ni los locos, ni los niños pequeños son responsables de sus actos pues carecen de uso de razón (y el uso de razón es imprescindible para la libertad).
ley.- Debe existir una norma desde la que se puedan juzgar los hechos realizados. La responsabilidad implica rendir cuenta de los propios actos ante alguien que ha regulado un comportamiento.
Existen diferentes tipos de responsabilidades:
-social empresarial
-limitada
-civil
-moral
-subsidiaria
-como valor
-ambiental
-contractual
-jurídica
1) Averigüen qué comprende cada una y den ejemplos.
2) Busquen en el diario titulares donde aparezcan estas "responsabilidades" y llevenlos a clase.
¿Cómo ser más responsables?
El camino más rápido para mejorar en responsabilidad es apreciar claramente que de nuestro comportamiento dependen cosas grandes. Los hombres con ideales y metas elevadas se responsabilizan enseguida de sus decisiones.
¿Qué cualidades ayudan a la responsabilidad? Hay varias virtudes que se relacionan mutuamente con la responsabilidad.
Valentía.- Para dar cuenta de los propios actos hace falta un valor capaz de superar el temor al castigo. (Responsabilidad ante los demás).
Humildad.- El orgullo dificulta pedir perdón; mientras que la persona humilde reconoce sus fallos. (Responsabilidad ante uno mismo).
Piedad basada en la filiación divina.- Quien aprecia el gran don de ser hijo de Dios procura que su comportamiento agrade a su Padre. (Responsabilidad ante Dios).
3) ¿Qué otras virtudes consideras que ayudan a ser responsable?
4) Dar ideas o sugerencias para mejorar la "responsabilidad en la escuela y en nuestra casa"
BILIOGRAFÍA
www.wikipedia.org
http://definicion.de/responsabilidad/#ixzz2QBqgB7bn
SEGUNDO AÑO/HISTORIA DE GRECIA Y ROMA
ACTIVIDAD Nº 1
Sobre el ocio en Grecia y Roma.
1. Ubica en un mapa de Europa político a Grecia e Italia.
2. Lee ambos textos
3. Busca en diccionarios o Internet, palabras desconocidas y anota su significado.
4. Subraya ideas principales (rojo) y secundarias (azul). Recuerda que la idea principal es una sola, y las secundarias pueden ser entre tres y seis, pero no más.
5. Realiza un cuadro comparativo sobre la diversión de griegos y romanos.
6. Establece relaciones con la actualidad
7. Ilustra el trabajo con imágenes que representen las escenas que más te gustaron de griegos y romanos.
8. Entregar en clase el lunes 22/4.
LAS DIVERSIONES EN LA GRECIA ANTIGUA
El estilo de vida ateniense era en esencia sencillo. Las casas atenienses estaban amuebladas con los artículos comprados á los artesanos como camas, asientos, mesas, baúles, artículos de cerámica, taburetes, cestas y utensilios de cocina. Las vestimentas y las frazadas las tejían las mujeres y los esclavos. La dieta ateniense era más bien simple. La comida básica consistía en cebada, trigo, mijo, lentejas uvas, higos, aceitunas, almendras, pan horneado en casa, vegetales, huevos, pescado, queso y pollo. El aceite de oliva se utilizaba de manera generalizada, no sólo en la comida, sino en las lámparas y para untarse el cuerpo después de lavarse y hacer ejercicio. Aunque en los hogares de los campesinos había animales, éstos no daban solamente carne, por ejemplo: los bueyes eran útiles para arar, la oveja por su lana y las cabras para obtener leche y quesos. La carne se consumía sólo en ocasiones especiales, como en los festivales; se sacrificaban animales y luego cocinaban su carne para comerse después.
El ocio en Grecia debía ocupar buena parte de la jornada de los ciudadanos ya que en la mayoría de las polis estaba mal considerado el trabajo manual. Para estos menesteres disponían de numerosos esclavos y de extranjeros, llamados metecos, que constituían un amplio porcentaje de la población.
Acudir a los baños era una actividad frecuente entre los ciudadanos helenos ya que en la mayoría de las casas no había agua corriente, al tiempo que servían como centro de reunión. Estos baños públicos serán numerosos durante el siglo IV a. C. y pasarán a Roma. Los griegos no conocían el jabón. En el baño se debía utilizar bien un carbonato de sosa impuro, bien una solución de potasa, o bien arcilla especial. Les gustaba bañarse antes de cenar.
Los griegos no empezaron a afeitarse completamente la barba y el bigote hasta después de Alejandro. En la época clásica, cuando se habla de una navaja siempre se trata de un accesorio del aseo femenino, ya que, para hacer desaparecer por completo el vello superfluo, las mujeres se depilaban con el candil o por medio de pastas especiales, pero también utilizaban navajas.
Después de las guerras médicas, en Atenas los niños eran casi los únicos que seguían llevando el pelo muy largo: cuando se aproximaban a la edad de la efebía se lo cortaban y lo consagraban a los dioses. Las mujeres libres sólo se cortaban el pelo temporalmente en señal de duelo. También era habitual dar largos paseos, utilizando las stoas, largos pórticos en ocasiones de dos pisos y dos naves cerrados por un testero, siempre decorados con frescos, mosaicos o cuadros. Recordemos que una escuela filosófica será denominada estoica por reunirse sus discípulos en una stoa. La stoa de Eco en Olimpia tenía doscientos metros de longitud. Pero la actividad favorita por excelencia entre los ciudadanos será la política.
Podemos afirmar que los griegos gozaban de la política, participando activamente en el gobierno de sus polis. No olvidemos que todos los ciudadanos atenienses podían participar en la Asamblea donde se toman las decisiones más relevantes de la ciudad.
La música y el teatro serán dos de las actividades favoritas para disfrutar del ocio. Existían dos edificios destinados a tal fin, el odeón y el teatro, contando todas las polis con significativos ejemplos, siendo el más importante el teatro de Epidauro por su configuración acústica ya que desde todos los puntos se alcanza una calidad de sonido difícilmente superable. Al teatro acuden casi todas las clases sociales, recibiendo los ciudadanos más pobres una subvención para poder adquirir las entradas. Los actores iban cubiertos con máscaras y vestidos con trajes concretos para que el espectador pudiera identificar claramente a quien representaban.
Los griegos daban mucha importancia al ejercicio físico, siendo una de las actividades educativas más importantes. Los atletas competían en juegos, celebrados en cada una de las polis, aunque existían algunos que tenían carácter supranacional como los Olímpicos o los Píticos, dedicados a Zeus y Apolo respectivamente. Tenían lugar cada cuatro años y durante el tiempo que duraba la celebración existía una tregua panhelénica. Los atletas participaban desnudos en la competición, cubiertos con una capa de aceite que resaltaba la belleza de sus cuerpos, y sólo los hombres tenían acceso a contemplar las pruebas. Durante casi un año se entrenaban en las cercanías del templo de Zeus y los ganadores recibían una rama de olivo como triunfo, aunque obtenían numerosos beneficios a posteriori como exención de impuestos o derecho a manutención gratuita.
LA DIVERSIÓN EN ROMA
Las distracciones eran raras. Por la tarde jugaba a la pelota o iba a los baños que eran, como el café moderno, la cita de los ociosos. Sólo algunas procesiones religiosas y algunos juegos del circo alteraban a veces la monotonía del año.
La diversión con mayúsculas del mundo romano es el circo o los juegos circenses. En el circo encontramos deporte, pasión e incluso ideas religiosas o políticas por lo que algunos especialistas lo consideran como algo más que espectáculo. La tradición hace referencia a los reyes etruscos como los creadores de los juegos en Roma, ya en el lugar donde posteriormente se instalaría el Circo Máximo. Estas ceremonias posiblemente tuvieran un origen funerario, con el fin de conjurar los poderes de ultratumba.
Los emperadores recreaban al pueblo con grandes y repetidas fiestas. En Roma había ciento sesenta y cinco días de fiesta al año, algunas, la inauguración del Coliseo verbigracia, duraron cien días seguidos. Dichas fiestas eran espectáculos que se celebraban en el el teatro, en el circo y en el anfiteatro. Empezaban por la mañana y se terminaban a la puesta del sol. Cuando asistía el emperador se repartían sorpresa, golosinas y vino.
En los teatros, el mayor de los cuales era el de Pompeyo, se representaban comedias, tragedias, farsas y pantomimas. Las comedias eran las obras dramáticas que Plauto y Terencio traducían o imitaban del griego, y que tanto gustaron a los romanos hasta el siglo IV. Las tragedias eran menos apreciadas por aquel pueblo, poco refinado; a la postre eran funciones en que el asunto importaba menos que el aparato escénico lo propio sucede con las óperas modernas y las comedias de magia. Pero los espectadores preferían las farsas y las pantomimas. Las farsas o atelanas, así llamadas porque, según Diomedes, ese género dramático se creó en Atela, ciudad de Campania, eran piezas en un acto, muy jocosas, parecidas al entremés o al sainete. La pantomima era una pieza dramática en que el actor, mimo o pantomimo, en vez de hablar, explicaba lo que sentía por medio de gestos. La perfección a que llegaron, en este género, los actores griegos, parece que no la han alcanzado nuestros contemporáneos. El teatro romano era, pues, un espectáculo que recreaba la vista, mas que el espíritu.
En el circo romano se daban carreras de carros y de caballos. El Circo Máximo, así llamado por su magnitud y porque e él se celebraban los juegos consagrados a lo dios magnos, tenía cabida para 300,000 espectadores.
La planta tenía la forma de un paralelogramo alargado, cerrado por un lado en semicírculo, ahí se abría la puerta triunfal, y en el lado opuesto, por una línea convexa, ahí estaban las cocheras. Las gradas ocupaban tres lados, y la arena o pista estaba dividida longitudinalmente, aunque no por completo, por un muro de poca altura, llamado espina (espina dorsal de la pista) en cuyos extremos se alzaban sendos hitos cónicos, bastante altos y dorados, que eran las metas. La pista tenía casi un kilómetro de extensión y era preciso darle la vuelta siete veces en cada carrera.
Cada día habla veinticuatro carreras, comprendiendo cada una cuatro carros tirados por dos caballos (biga) o por cuatro (cuadriga). Los cocheros circenses o aurigas lucían túnicas muy cortas ceñidas al cuerpo con correas para evitar que flotaran con la velocidad de la carrera. Los aurigas se distinguían por el color de la túnica, según: la cuadra, orden o bando a que pertenecían verde alusivo a la primavera; rojo al verano; azul, al otoño y blanco, al invierno. Esos cocheros a más de ganaban mucho dinero, eran muy populares. Sus partidarios no sólo apostaban contra el competidor en la carrera, sino que también, ello era frecuente, reñían y armaban verdaderos motines en el circo. El oficio de auriga tenía sus peligros; los carros al dar la vuelta de la espina, uno muy estrecho, en que estaban las metas, volcaban con suma facilidad.
Los emperadores dieron gran solemnidad a las carreras. Ellos hicieron que los juegos comenzaran con una procesión que dirigía el magistrado que presidía los juegos, y que a partir de Calígula, dirigió el emperador; procesión en la que figuraban los magistrados, los clientes, la flor y nata de la juventud romana, los aurigas, los luchadores, cerrando la comitiva, los sacerdotes y las corporaciones religiosas, las cuales acompañaban las imágenes de los dioses, con sus símbolos y atributos.
Los anfiteatros (el más notable fue el Coliseo o anfiteatro Flavio) eran circos cuya pista, más oval, no tenía espina. En ellos se celebraban varios espectáculos, especialmente los combates de gladiadores. Se atribuye el origen de estos combates a los sacrificios humanos que hacían los etruscos en los funerales de los grandes personajes para aplacar los manes de éstos. La moda influyó para que se reemplazaran con luchas entre dos esclavos. Bajo el imperio, esos juegos se reglamentaron y se llegaron a dar combates en que quinientas parejas de gladiadores venían a las manos. Los gladiadores eran condenados a muerte, esclavos, cautivos de guerra y a veces también hombres libres ansiosos de celebridad. Se les ejercitaba en ludus gladiatorius. El que fundaba una escuela de este género obtenía magníficas ganancias.
Los gladiadores combatían a pie, a caballo y en carros se les hacia luchar en parejas o en grupos. Generalmente habían de enfrentarse hombres que tuvieran armas diferentes. Entre los gladiadores se distinguían los samnitas, que se presentaban casi desnudos, y llevaban un gran escudo cuadrado y un sable corvo; los mirmillones, armados como los legionarios; los hoplitas, cubiertos de hierro como los caballeros de la Edad Media; los tracios, cubierta la cabeza con casco de anchas alas; los reciarios, armados solamente con una red de pescar y un tridente. Toda esa gente iba, antes de comenzar los juegos, a colocarse en fila delante de la tribuna del emperador para gritar «Ave, César Imperator, morituri te salutant» (Salve, César emperador; los que van a morir te saludan).
Los esclavos sacaban los cadáveres de la pista prendiéndolos con ganchos y tirando de ellos; un hombre vestido de Mercurio comprobaba la muerte de aquellos infelices, tocándolos con un hierro candente; a los heridos que no podían curar se les daba la muerte. Esos juegos sangrientos, que con sólo imaginarlos nos horripilamos, eran deliciosos para el pueblo romano.
Había días en que la pista se convertía en lago, y entonces se daban batallas navales; había otros en que, los gladiadores llamados bestiarios, luchaban con animales feroces. Por último, a aquellos anfiteatros se llevaba a los condenados a muerte, para que fueran devorados por tigres y leones, suplicio que cupo frecuentemente a los mártires cristianos.
http://www.portalplanetasedna.com.ar/grecia6.htm
ACTIVIDAD Nº 2
Sobre el Siglo de Pericles.
Luego de vencer a los Persas en las Guerras Médicas, Atenas alcanza la supremacía en la Liga de Delos. Este periodo es denominado como la 'Edad de Oro de Atenas', o 'Siglo de Pericles' en honor al gobernante que llevó a Atenas a su máximo esplendor.
a) Averigua sobre Pericles y por qué fue tan importante para Grecia.Redacta una breve biografía.
b) Busca información sobre este período
c) Realiza un cuadro síntesis de sus producciones culturales
d) Acompaña con imágenes representativas.
ACTIVIDAD Nº 3
Sobre la Guerra del Peloponeso y el Imperio de Alejandro Magno.
Las diferencias entre Atenas y Esparta desembocaron en la destructora Guerra del Peloponeso, en la que participaron casi todos los griegos unidos a uno u otro bando. La guerra duró hasta el 404 a.C. y acabó con la derrota de los atenienses y el establecimiento de la hegemonía espartana sobre Grecia. Aprovechando la confusión y debilidad de los contendientes en las Guerras del Peloponeso, el rey Filipo II de Macedonia convirtió su reino en la nueva potencia de la Hélade. Macedonia no estaba desgastada por las luchas y disponía de recursos naturales (cereales, oro y madera). La batalla de Queronea (338 a.C.) le permitió anexionarse Atenas y Tebas. Tras la muerte de Filipo II, su hijo Alejandro Magno, conquistó Persia y dirigió sus ejércitos hacia Egipto y la India, formando un gran imperio. Tras su muerte en Babilonia (323 a.C.) sus generales se repartieron sus posesiones. Con Alejandro desaparecía el antiguo poder de los griegos, pero no su cultura que, fusionada con la oriental, dio origen al mundo helenístico.
a) Investiga los motivos que llevaron a la Guerra del Peloponeso y sus consecuencias.
b) Averigua sobre Filipo II, rey de Macedonia y Alejandro Magno. Redacta una breve biografía. Busca y pega sus retratos.
c) Especifica qué características políticas, económicas, religiosas y socio culturales constituian el mundo helenístico.
d) Anexar imágenes relevantes de su cultura.
Sobre el ocio en Grecia y Roma.
1. Ubica en un mapa de Europa político a Grecia e Italia.
2. Lee ambos textos
3. Busca en diccionarios o Internet, palabras desconocidas y anota su significado.
4. Subraya ideas principales (rojo) y secundarias (azul). Recuerda que la idea principal es una sola, y las secundarias pueden ser entre tres y seis, pero no más.
5. Realiza un cuadro comparativo sobre la diversión de griegos y romanos.
6. Establece relaciones con la actualidad
7. Ilustra el trabajo con imágenes que representen las escenas que más te gustaron de griegos y romanos.
8. Entregar en clase el lunes 22/4.
LAS DIVERSIONES EN LA GRECIA ANTIGUA
El estilo de vida ateniense era en esencia sencillo. Las casas atenienses estaban amuebladas con los artículos comprados á los artesanos como camas, asientos, mesas, baúles, artículos de cerámica, taburetes, cestas y utensilios de cocina. Las vestimentas y las frazadas las tejían las mujeres y los esclavos. La dieta ateniense era más bien simple. La comida básica consistía en cebada, trigo, mijo, lentejas uvas, higos, aceitunas, almendras, pan horneado en casa, vegetales, huevos, pescado, queso y pollo. El aceite de oliva se utilizaba de manera generalizada, no sólo en la comida, sino en las lámparas y para untarse el cuerpo después de lavarse y hacer ejercicio. Aunque en los hogares de los campesinos había animales, éstos no daban solamente carne, por ejemplo: los bueyes eran útiles para arar, la oveja por su lana y las cabras para obtener leche y quesos. La carne se consumía sólo en ocasiones especiales, como en los festivales; se sacrificaban animales y luego cocinaban su carne para comerse después.
El ocio en Grecia debía ocupar buena parte de la jornada de los ciudadanos ya que en la mayoría de las polis estaba mal considerado el trabajo manual. Para estos menesteres disponían de numerosos esclavos y de extranjeros, llamados metecos, que constituían un amplio porcentaje de la población.
Acudir a los baños era una actividad frecuente entre los ciudadanos helenos ya que en la mayoría de las casas no había agua corriente, al tiempo que servían como centro de reunión. Estos baños públicos serán numerosos durante el siglo IV a. C. y pasarán a Roma. Los griegos no conocían el jabón. En el baño se debía utilizar bien un carbonato de sosa impuro, bien una solución de potasa, o bien arcilla especial. Les gustaba bañarse antes de cenar.
Los griegos no empezaron a afeitarse completamente la barba y el bigote hasta después de Alejandro. En la época clásica, cuando se habla de una navaja siempre se trata de un accesorio del aseo femenino, ya que, para hacer desaparecer por completo el vello superfluo, las mujeres se depilaban con el candil o por medio de pastas especiales, pero también utilizaban navajas.
Después de las guerras médicas, en Atenas los niños eran casi los únicos que seguían llevando el pelo muy largo: cuando se aproximaban a la edad de la efebía se lo cortaban y lo consagraban a los dioses. Las mujeres libres sólo se cortaban el pelo temporalmente en señal de duelo. También era habitual dar largos paseos, utilizando las stoas, largos pórticos en ocasiones de dos pisos y dos naves cerrados por un testero, siempre decorados con frescos, mosaicos o cuadros. Recordemos que una escuela filosófica será denominada estoica por reunirse sus discípulos en una stoa. La stoa de Eco en Olimpia tenía doscientos metros de longitud. Pero la actividad favorita por excelencia entre los ciudadanos será la política.
Podemos afirmar que los griegos gozaban de la política, participando activamente en el gobierno de sus polis. No olvidemos que todos los ciudadanos atenienses podían participar en la Asamblea donde se toman las decisiones más relevantes de la ciudad.
La música y el teatro serán dos de las actividades favoritas para disfrutar del ocio. Existían dos edificios destinados a tal fin, el odeón y el teatro, contando todas las polis con significativos ejemplos, siendo el más importante el teatro de Epidauro por su configuración acústica ya que desde todos los puntos se alcanza una calidad de sonido difícilmente superable. Al teatro acuden casi todas las clases sociales, recibiendo los ciudadanos más pobres una subvención para poder adquirir las entradas. Los actores iban cubiertos con máscaras y vestidos con trajes concretos para que el espectador pudiera identificar claramente a quien representaban.
Los griegos daban mucha importancia al ejercicio físico, siendo una de las actividades educativas más importantes. Los atletas competían en juegos, celebrados en cada una de las polis, aunque existían algunos que tenían carácter supranacional como los Olímpicos o los Píticos, dedicados a Zeus y Apolo respectivamente. Tenían lugar cada cuatro años y durante el tiempo que duraba la celebración existía una tregua panhelénica. Los atletas participaban desnudos en la competición, cubiertos con una capa de aceite que resaltaba la belleza de sus cuerpos, y sólo los hombres tenían acceso a contemplar las pruebas. Durante casi un año se entrenaban en las cercanías del templo de Zeus y los ganadores recibían una rama de olivo como triunfo, aunque obtenían numerosos beneficios a posteriori como exención de impuestos o derecho a manutención gratuita.
LA DIVERSIÓN EN ROMA
Las distracciones eran raras. Por la tarde jugaba a la pelota o iba a los baños que eran, como el café moderno, la cita de los ociosos. Sólo algunas procesiones religiosas y algunos juegos del circo alteraban a veces la monotonía del año.
La diversión con mayúsculas del mundo romano es el circo o los juegos circenses. En el circo encontramos deporte, pasión e incluso ideas religiosas o políticas por lo que algunos especialistas lo consideran como algo más que espectáculo. La tradición hace referencia a los reyes etruscos como los creadores de los juegos en Roma, ya en el lugar donde posteriormente se instalaría el Circo Máximo. Estas ceremonias posiblemente tuvieran un origen funerario, con el fin de conjurar los poderes de ultratumba.
Los emperadores recreaban al pueblo con grandes y repetidas fiestas. En Roma había ciento sesenta y cinco días de fiesta al año, algunas, la inauguración del Coliseo verbigracia, duraron cien días seguidos. Dichas fiestas eran espectáculos que se celebraban en el el teatro, en el circo y en el anfiteatro. Empezaban por la mañana y se terminaban a la puesta del sol. Cuando asistía el emperador se repartían sorpresa, golosinas y vino.
En los teatros, el mayor de los cuales era el de Pompeyo, se representaban comedias, tragedias, farsas y pantomimas. Las comedias eran las obras dramáticas que Plauto y Terencio traducían o imitaban del griego, y que tanto gustaron a los romanos hasta el siglo IV. Las tragedias eran menos apreciadas por aquel pueblo, poco refinado; a la postre eran funciones en que el asunto importaba menos que el aparato escénico lo propio sucede con las óperas modernas y las comedias de magia. Pero los espectadores preferían las farsas y las pantomimas. Las farsas o atelanas, así llamadas porque, según Diomedes, ese género dramático se creó en Atela, ciudad de Campania, eran piezas en un acto, muy jocosas, parecidas al entremés o al sainete. La pantomima era una pieza dramática en que el actor, mimo o pantomimo, en vez de hablar, explicaba lo que sentía por medio de gestos. La perfección a que llegaron, en este género, los actores griegos, parece que no la han alcanzado nuestros contemporáneos. El teatro romano era, pues, un espectáculo que recreaba la vista, mas que el espíritu.
En el circo romano se daban carreras de carros y de caballos. El Circo Máximo, así llamado por su magnitud y porque e él se celebraban los juegos consagrados a lo dios magnos, tenía cabida para 300,000 espectadores.
La planta tenía la forma de un paralelogramo alargado, cerrado por un lado en semicírculo, ahí se abría la puerta triunfal, y en el lado opuesto, por una línea convexa, ahí estaban las cocheras. Las gradas ocupaban tres lados, y la arena o pista estaba dividida longitudinalmente, aunque no por completo, por un muro de poca altura, llamado espina (espina dorsal de la pista) en cuyos extremos se alzaban sendos hitos cónicos, bastante altos y dorados, que eran las metas. La pista tenía casi un kilómetro de extensión y era preciso darle la vuelta siete veces en cada carrera.
Cada día habla veinticuatro carreras, comprendiendo cada una cuatro carros tirados por dos caballos (biga) o por cuatro (cuadriga). Los cocheros circenses o aurigas lucían túnicas muy cortas ceñidas al cuerpo con correas para evitar que flotaran con la velocidad de la carrera. Los aurigas se distinguían por el color de la túnica, según: la cuadra, orden o bando a que pertenecían verde alusivo a la primavera; rojo al verano; azul, al otoño y blanco, al invierno. Esos cocheros a más de ganaban mucho dinero, eran muy populares. Sus partidarios no sólo apostaban contra el competidor en la carrera, sino que también, ello era frecuente, reñían y armaban verdaderos motines en el circo. El oficio de auriga tenía sus peligros; los carros al dar la vuelta de la espina, uno muy estrecho, en que estaban las metas, volcaban con suma facilidad.
Los emperadores dieron gran solemnidad a las carreras. Ellos hicieron que los juegos comenzaran con una procesión que dirigía el magistrado que presidía los juegos, y que a partir de Calígula, dirigió el emperador; procesión en la que figuraban los magistrados, los clientes, la flor y nata de la juventud romana, los aurigas, los luchadores, cerrando la comitiva, los sacerdotes y las corporaciones religiosas, las cuales acompañaban las imágenes de los dioses, con sus símbolos y atributos.
Los anfiteatros (el más notable fue el Coliseo o anfiteatro Flavio) eran circos cuya pista, más oval, no tenía espina. En ellos se celebraban varios espectáculos, especialmente los combates de gladiadores. Se atribuye el origen de estos combates a los sacrificios humanos que hacían los etruscos en los funerales de los grandes personajes para aplacar los manes de éstos. La moda influyó para que se reemplazaran con luchas entre dos esclavos. Bajo el imperio, esos juegos se reglamentaron y se llegaron a dar combates en que quinientas parejas de gladiadores venían a las manos. Los gladiadores eran condenados a muerte, esclavos, cautivos de guerra y a veces también hombres libres ansiosos de celebridad. Se les ejercitaba en ludus gladiatorius. El que fundaba una escuela de este género obtenía magníficas ganancias.
Los gladiadores combatían a pie, a caballo y en carros se les hacia luchar en parejas o en grupos. Generalmente habían de enfrentarse hombres que tuvieran armas diferentes. Entre los gladiadores se distinguían los samnitas, que se presentaban casi desnudos, y llevaban un gran escudo cuadrado y un sable corvo; los mirmillones, armados como los legionarios; los hoplitas, cubiertos de hierro como los caballeros de la Edad Media; los tracios, cubierta la cabeza con casco de anchas alas; los reciarios, armados solamente con una red de pescar y un tridente. Toda esa gente iba, antes de comenzar los juegos, a colocarse en fila delante de la tribuna del emperador para gritar «Ave, César Imperator, morituri te salutant» (Salve, César emperador; los que van a morir te saludan).
Los esclavos sacaban los cadáveres de la pista prendiéndolos con ganchos y tirando de ellos; un hombre vestido de Mercurio comprobaba la muerte de aquellos infelices, tocándolos con un hierro candente; a los heridos que no podían curar se les daba la muerte. Esos juegos sangrientos, que con sólo imaginarlos nos horripilamos, eran deliciosos para el pueblo romano.
Había días en que la pista se convertía en lago, y entonces se daban batallas navales; había otros en que, los gladiadores llamados bestiarios, luchaban con animales feroces. Por último, a aquellos anfiteatros se llevaba a los condenados a muerte, para que fueran devorados por tigres y leones, suplicio que cupo frecuentemente a los mártires cristianos.
http://www.portalplanetasedna.com.ar/grecia6.htm
ACTIVIDAD Nº 2
Sobre el Siglo de Pericles.
Luego de vencer a los Persas en las Guerras Médicas, Atenas alcanza la supremacía en la Liga de Delos. Este periodo es denominado como la 'Edad de Oro de Atenas', o 'Siglo de Pericles' en honor al gobernante que llevó a Atenas a su máximo esplendor.
a) Averigua sobre Pericles y por qué fue tan importante para Grecia.Redacta una breve biografía.
b) Busca información sobre este período
c) Realiza un cuadro síntesis de sus producciones culturales
d) Acompaña con imágenes representativas.
ACTIVIDAD Nº 3
Sobre la Guerra del Peloponeso y el Imperio de Alejandro Magno.
Las diferencias entre Atenas y Esparta desembocaron en la destructora Guerra del Peloponeso, en la que participaron casi todos los griegos unidos a uno u otro bando. La guerra duró hasta el 404 a.C. y acabó con la derrota de los atenienses y el establecimiento de la hegemonía espartana sobre Grecia. Aprovechando la confusión y debilidad de los contendientes en las Guerras del Peloponeso, el rey Filipo II de Macedonia convirtió su reino en la nueva potencia de la Hélade. Macedonia no estaba desgastada por las luchas y disponía de recursos naturales (cereales, oro y madera). La batalla de Queronea (338 a.C.) le permitió anexionarse Atenas y Tebas. Tras la muerte de Filipo II, su hijo Alejandro Magno, conquistó Persia y dirigió sus ejércitos hacia Egipto y la India, formando un gran imperio. Tras su muerte en Babilonia (323 a.C.) sus generales se repartieron sus posesiones. Con Alejandro desaparecía el antiguo poder de los griegos, pero no su cultura que, fusionada con la oriental, dio origen al mundo helenístico.
a) Investiga los motivos que llevaron a la Guerra del Peloponeso y sus consecuencias.
b) Averigua sobre Filipo II, rey de Macedonia y Alejandro Magno. Redacta una breve biografía. Busca y pega sus retratos.
c) Especifica qué características políticas, económicas, religiosas y socio culturales constituian el mundo helenístico.
d) Anexar imágenes relevantes de su cultura.
jueves, 4 de abril de 2013
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